LA ETERNIDAD

LA ETERNIDAD

el tiempo, el recuerdo y el olvido

El tiempo…el tiempo es la muerte de la eternidad, cuando hay un comienzo y un final. Es como si te echaran en las manos abiertas un puñado de arena muy fina, tan fina que se escurre entre tus dedos. Al inicio intentas acomodar tus dedos para tratar de retenerla pero entre más lo haces más rápido escapa y luego dejas de intentarlo y aceptas que irremediablemente se escapará.

Ese momento inicial (nacimiento) y final  (muerte) son el tiempo, Son tu tiempo. Esa arena que era tu tiempo permanecerá como un montón de arena durante un instante más, de una u otra forma manteniendo lo que fue tu tiempo después de finalizado. Este ya no es el tiempo. Ya está un paso más allá, es el recuerdo que permanece de una u otra forma asemejando burdamente a la eternidad. Mas sin embargo, el recuerdo como el tiempo está marcado por un final así no lo parezca, ya que los vientos de los años transcurridos, su mismo devenir, van erosionando lenta e inexorablemente dicho promontorio barriéndolo hasta que se pierde generalmente sin dejar huella, o posiblemente algunas veces, un rastro casi imperceptible y deformado.

Los seres humanos y todos los seres vivos en general, atados como estamos a los designios del tiempo tenemos conciencia de él y nos atormenta por siempre como si ansiáramos la eternidad ya que al final nos quitara las cosas buenas que ellos conllevan o en caso contrario la esperanza siempre viva de que ellas ocurran. Así, la vida (o el tiempo) de las personas estará marcada o por la felicidad o por sus anhelos. Siempre temeremos que una de las dos cosas o generalmente las dos terminen. Porque al finalizar solo seremos recuerdo, solo existiremos de forma transitoria y de acuerdo a los caprichos de la en la memoria de los que todavía están vivos.

Así la parca siempre estará en nuestra pesadillas y más que ahí, en nuestro tiempo. Como un plazo que siempre se vencerá y que te dice: debes hacer todo lo que te has dicho: “tienes que hacer en tu tiempo” en el mejor de los casos porque otras veces ni siquiera has comenzado a pensar en ello.

Así casi siempre querremos evitar este último paso y vivir postergando el encuentro final, el dejar atrás el tiempo pero siempre se interpone una barrera enorme, la barrera de nuestra propia naturaleza. Somos mortales muy a nuestro pesar.

Este es un drama similar al que aquejaba al doctor fausto, el personaje de la novela del mismo nombre escrita por el gran escritor alemán Johann Goethe. Para los que no conocen la historia aquí se las cuento. Resulta que era fausto un viejo alquimista muy sabio y poseedor de grandes conocimientos tanto los establecidos por la razón como los encontrados a través de las ciencias de lo oculto, ya que no había tenido otro interés que el de debelar el principio que mantenía unido al mundo y funcionando que sin lugar a dudas podemos relacionar con la causa última o dios. Después de envejecer en tal propósito estaba ya hastiado así que deseó morir lo cual fue escuchado por mefisto o sea el mismísimo satán. Este prometió abrir su mundo al deseo a cambio de que el anciano alquimista lo sirviera en las posadas infernales una vez muerto.

No teniendo deseos de nada mas acepta fausto la propuesta de mefisto y vive múltiples aventuras hasta que conoce a la joven gretchen de la cual fausto se enamora perdidamente. Logra fausto con el concurso de mefisto seducir finalmente a gretchen, que representa el ideal de belleza, quien se le entrega, sin embargo, esta le había dado una poción para adormilar a su madre y poder huir para encontrar el goce del amor febril y prohibido.

Fausto firmando el contrato con mefistofeles

El hermano de gretchen acusa a fausto por ello y al final es muerto por acción de fausto y mefisto, lo cual deja a la culpable gretchen hecha un mar de lágrimas tal que decide ahorcar el hijo ilegitimo que había tenido con fausto y Por ello es acusada de brujería y condenada posteriormente a la hoguera, fausto intenta liberarla con el concurso de mefisto, gretchen ante ello decide mejor morir y lo hace en los brazos de fausto. Este ya ha perdido todo lo que había deseado, había renunciado a la piedad por el amor el cual ahora perdía. Cuando ya mefisto ve conseguido su propósito de raptar para su redil al antes piadoso fausto este se arrepiente y es salvado por ello. Es redimido al final.

Así como a fausto le sucede en cierta forma al ser humano moderno. Después de trasegar por los caminos de la historia y de debelar los misterios del universo pareciese cansado, quedando para él oculta la llave de su anhelo más preciado. Seguramente para fausto no lo era la eternidad y si el amor y la belleza, pero para el ser humano moderno si puede serlo. El deseo de la inmortalidad nunca se ha marchitado en nuestros corazones a pesar descubrir con cada nuevo secreto robado a la niebla de la ignorancia y con cada uno de ellos se nos hace igualmente más claro el camino y los mecanismos de la vida y la muerte.

La ciencia cada vez nos da más chance de vencer la biología, o mejor dicho, ponerla de nuestra parte para conseguir nuestros propósitos pero no permitirá abrir la puerta a la eternidad? Pregunta difícil pero que si bien antes era imposible hoy no se ve tan absurdo. Por un lado los continuos avances en la medicina van aumentando la esperanza de vida, así como los que se hacen en biomecánica permitirán obtener ya sea piezas de reemplazo o capacidad aumentada de los sentidos; Ya hoy se trabaja en ello y se han dado avances que incluso se han ya implementado a una escala tímida.

Además de esto cada vez se conocen más los mecanismos de la vejez, que genes y mecanismos las desencadenan así como también los medios para reescribirlos. Dos avances como la codificación del genoma humano y la edición genética (cripr cas9) permitirían diseñar el propio genoma humano y rehacernos a nuestra imagen y semejanza.

la poshumanidad

Pero volviendo sobre lo que habíamos dicho así como el anhelo de fausto era la belleza y la pasión, la del ser humano que ya desde hace tiempo acepto el nihilismo como algo inevitable es la eternidad; el más viejo  y profundo deseo, el que siempre ha deseado. Primero ha dado pasos hacia la longevidad y la mejoría de los años posteriores de la existencia, pero algunas personas han pensado dar algunos pasos adelante en ese propósito, o al menos, así lo han imaginado algunas personas. Así han aparecido ideas contemporáneas como la transhumanidad, la pos humanidad y la pos biología.

Quienes han elaborado estas teorías describen la transhumanidad como la modificación paulatina del ser humano permitiendo el alargamiento de la vida, al aumento de la percepción por parte de los sentidos, capacidad cerebral aumentada y vencimiento del dolor y la vejez. Esto se irá profundizando tanto que llegara a un punto tal que ya lo resultante no podrá ser calificado como humano incluso por la modificación profunda del genoma. Paralelamente se transformaran gran parte de los seres vivos tal cual lo desean pasando así a la pos biología.

Ahora, no es la única transformación. También vienen la cuarta revolución industrial y con ella retos económicos y sociales tan trascendentales como estos. Las formas de producción y los trabajos sufrirán una transformación que puede ser incluso más radical que las otras tres juntas pero para los que crean que les estoy hablado en chino les aclaro un poco de que se trata la cuarta revolución industrial.

Resulta que como consecuencia de los avances de los avances sobre todo de la tercera cada vez tenemos más cerca la posibilidad de automatizar los procesos productivos hasta tal punto que muchos quedaran en manos de las maquinas. Esto no es algo nuevo. Posiblemente si lo sea la escala y el alcance. Las primeras revoluciones afectaron a los sectores primario y secundario de la economía fuertemente y La tercera más el terciario. Pero la cuarta afectará todos los sectores de una manera muy profunda.

Por otra parte, las dos primeras revoluciones fueron energéticas  (la primera del carbón y el vapor, la segunda del petróleo y la electricidad) y la tercera (la informática) no lo fue tanto ya que se sostuvo con los desarrollos energéticos existentes sin problemas. Sin embargo la cuarta eso está por decidir. No tanto por la posibilidad técnica de hacerlo con los medios energéticos disponibles sino por su sostenibilidad.

Y es aquí donde tenemos que recrear la imagen del mundo posible, sus ventajas y desventajas, obviamente frente a la óptica de este su humilde servidor. Lo primero sería un mundo materialmente mucho más rico que el actual y con personas mucho más viejas y posiblemente con demandas de recursos muy altas. Digamos que esto no se ve tan mal, hasta que pensamos en el ritmo creciente de la población humana. Hoy colocamos en entredicho la capacidad del planeta de abastecernos. Es algo harto polémico pues con un ajuste aquí y otro allá (eso sí, aclaro aquí que esos “ajustecitos” no son como cambiar el dial de una radio, no soy tan ingenuo) puede mejorar, Sin embargo, estamos hablando de una escala mucho mayor que la actual que confieso no sé hasta dónde se ha presupuestado (esta tarea se las dejo y me la dejo).

Por otra parte estaría la asimetría en el desarrollo de la humanidad o incluso en el desarrollo de dos grupos o especies diferentes: la humana y la pos humana. Como sería la relación entre estos dos mundos tan distantes? No creo que fuera poco conflictiva. Habría un tercer factor que sería el referente a quien definiría o cual sería el patrón de la nueva humanidad y del nuevo mundo pos biológico. Seria este mundo solo la respuesta a los temores y zonas oscuras de los sentimientos de la especie humana?.

Además de esta asimetría se plantea unas profundas contradicciones en el modelo que lo alimenta que es el que la naturaleza ha impuesto: el modelo progresivo que palabras más palabras menos dice que lo que no crece desaparece. Las poblaciones y especies de una u otra forma están condenadas a crecer para no desaparecer, pero paradójicamente cuando una espacie tiene éxito crece y al crecer utiliza más recursos, los cuales son limitados. Nunca nos planteamos realmente el límite de los recursos hasta que  llegamos al momento actual aunque ya el economista Malthus lo había hecho.

El éxito como especie nos lleva a plantear un modelo diferente a este donde hay un crecimiento exponencial. En los modelos de Malthus las poblaciones eran limitadas por factores externos como la enfermedad y la muerte…pero que pasaría si dichos factores no existieran? Pues ya hemos visto un crecimiento desmedido de la población humana en el pasado siglo y lo que va de este. Incrementándose desde 1910 la población humana desde los 1600 millones a los  casi 7600 de hoy día. Esto pensando que además la riqueza material se ha incrementado muestra que es difícil de sostener incluso para los niveles de hoy día. Se podría pensar en una sociedad muchísimo más longeva y con expectativas materiales muy superiores a las actuales y que al mismo tiempo siga creciendo exponencialmente?

la singularidad se aproxima?

Ahora bien, se presenta un fenómeno interesante en la especie humana. Tiende a reproducirse menos a medida que las condiciones materiales mejoran. Esto no ocurre de forma similar en las otras especies donde posiblemente sea de forma contraria pero es algo ya documentado por decir algo en tiempos de la pax romana donde por el bienestar nunca visto antes, se presentó además un bajón demográfico importante. Y es que a diferencia de los demás animales, el ser humano tiene una fuerte conciencia sobre sí mismo (como ya hemos visto) y sobre su bienestar individual. Así, bajo estas situaciones de no necesidad, esta menos dispuesto a enfrentar los esfuerzos de la crianza que de por si representan un gran esfuerzo para el individuo, además de que los estándares que la sociedad exige para ello son muchísimo superiores a las épocas de carestía. Aquí hay que aclarar que posiblemente no se puede dejar esta decisión al solo arbitrio de la razón humana ya que es posible que esta está más cimentada en la epígenetica que es la frontera gris entre natura y la cultura pero esto de por sí ya es algo más complejo y como digo más oscuro que requiere más tiempo y energía.

También es cierto que el crecimiento demográfico ha impulsado fuertemente a la humanidad en momentos clave. Uno por ejemplo fue hace 50.000 años cuando el ser humano luego de milenios de estar confinado en áfrica, sale a colonizar el mundo en lo que se ha llamado, el gran salto hacia adelante. Este hecho es entendible por razones como la abundancia de mano de obra pero Esto podría ser suplido fácilmente por la inteligencia artificial como de hecho ya está sucediendo pues la cuarta revolución ya está en progreso.

Sin embargo hay un factor, el tamaño de los mercados, que podría limitar la economía y la producción que además disminuiría el flujo de ideas y posiblemente desaparecería el impulso del individuo. Estas son posiblemente algunas las contradicciones que tendríamos que resolver para tener un sistema decreciente pero con un ser humano “eterno”.

No todos estamos convencidos de la eternidad. Posiblemente sea mejor y más liberador la aceptación de la muerte pero para ello debe combatir fuertemente contra su naturaleza. Igualmente el sentido de todo esto es exponer primero que todo la importancia del tiempo, segundo como esta idea nos mortifica y por ultimo plantear la oposición y contradicciones de un sistema creciente o decreciente, ya que es algo a lo que YA nos estamos enfrentando pero que todavía es un punto negro que no alcanzamos a visualizar.

Esa pregunta no la podre resolver aquí seguramente. Esas podrían ser las preguntas de ese siglo que seguramente será decisivo. Pero desde hoy debemos pensar en estas cuestiones que ya están aquí, que no son asuntos de escritores de ciencia ficción. Aquí cabe decir que como dicen los poshumanistas (mas allá de que lo comparta o no) se Muere como semilla para nacer como árbol. Será aquello cierto? No podría ser esta nueva criatura un reflejo de los temores de su antecesor? Ahora nos toca decidir si nacemos como nuevos humanos o como poshumanos y repito, esta queridos amigos, es la pregunta del siglo.